30.6: Conceptos clave al documentar

Precisión y totalidad

¿Cuán importante es la precisión al observar y documentar? Si le pidieran que escriba algo que hizo ayer, ¿cuán bien recordaría los detalles de ese momento? ¿Y si hoy le pidieran que escriba un momento de hace una semana ? ¿Qué recuerdo tendría detalles más precisos? La mayoría de las personas respondería que registrar un recuerdo de ayer sería más preciso y detallado que algo de hace una semana. Sin embargo, muchos cuidadores intentan documentar las observaciones días o semanas después de una actividad. Los plazos previstos, como una reunión familiar o la fecha de entrega de una tarea, suelen ser los momentos en los que los cuidadores deben sentarse y documentar a partir de observaciones anteriores. Lamentablemente, esperar tanto tiempo para registrar la información hace que la precisión y la claridad disminuyan.

Avancemos más con este ejercicio. ¿Qué pasaría si tuviera que anotar una conversación de ayer? ¿De la semana pasada? ¿Del mes pasado? ¿Puede recordar los detalles de lo que dijo? ¿Qué recuerdo sería más preciso: el de ayer, el de la semana pasada o el del mes pasado? ¿Cuánto confía en la precisión de lo que se dijo?

Las notas de observación deben ser precisas, objetivas y fácticas. Deben incluir hechos y detalles sobre el orden en que se producen. Analice la siguiente historia sobre Gabriel (33 meses), que ocurre durante una visita a su hogar. Lea el intercambio completo:

“Gabriel y su madre están uno al lado del otro. Cada uno está construyendo una torre con grandes bloques de plástico. Gabriel construye su torre tan alta como él. Se choca contra la torre con el brazo. La torre se cae y derriba la torre de bloques que construyó su madre. Gabriel se ríe y salta mientras aplaude. Su madre se ríe, aplaude y abraza a Gabriel”.

Esto es lo que documentó el cuidador:

“Gabriel construye una torre tan alta como él con grandes bloques de plástico. Empieza a reírse, a dar saltos, a aplaudir y se choca con su torre, por lo que la derriba y hace que la de su madre también se caiga”.

Esta observación del cuidador no es precisa. Los hechos están desordenados (reírse, saltar, aplaudir y chocar contra su torre). También falta información (Gabriel y su madre están uno al lado del otro, cada uno está construyendo una torre, la madre de Gabriel se ríe, aplaude y abraza a Gabriel). La precisión es importante. Con el tiempo, la imprecisión en las notas de observación puede dar lugar a interpretaciones erróneas o a malentendidos sobre lo que puede hacer un bebé o un niño pequeño.

Aquí le damos otros consejos para redactar notas de observación precisas:

• Anote el nombre del bebé o del niño pequeño y el de la persona que realiza la observación.
• Anote la fecha y la hora de la observación, el entorno (p. ej., interior/exterior, rutina, experiencia de juego) y si hay otros bebés, niños pequeños o adultos involucrados.
• Utilice abreviaturas, frases cortas, símbolos, dibujos y otras formas breves para captar rápido la información.
• Utilice la ortografía fonética para captar las vocalizaciones (p. ej., buh-buh-buh-mmmm) y los intentos de palabras (p. ej., “po' favo” en lugar de “por favor”).
• Observe con un compañero y luego compare las observaciones.[1]

Los cuidadores suelen documentar los comportamientos y luego olvidarse de lo que ocurrió antes (antecedente) y de lo que ocurrió después (consecuencia). Para registrar un acontecimiento completo, los cuidadores deben incluir el ABC:

• Antecedentes: los acontecimientos del entorno o los estímulos que desencadenan un comportamiento.
• Comportamiento: lo que la gente hace, dice, piensa o siente.
• Consecuencia: el resultado de un comportamiento. [2]

Unas palabras sobre la palabra “juego”

A los educadores les encanta la palabra “juego”, y tiene que ser una parte más significativa del vocabulario al enseñar y al planificar el día con un bebé o con un niño pequeño. Sin embargo, el juego casi nunca debe formar parte de la documentación. ¿Qué se le ocurre si le piden que describa a un bebé o a un niño pequeño mientras juega? Podría ser unos cuantos niños pequeños en el área sociodramática jugando a preparar la cena, un bebé o un niño pequeño cavando un agujero en el arenero, o un solo bebé apilando bloques u observando un trozo de tela. Si se utilizara la palabra “jugar” para documentar cada escena, la información se limitaría a “el niño jugó”, porque faltan los detalles. La palabra “jugar” puede considerarse una generalización, pero no brinda detalles acerca de la elaboración del plan de estudios o de la evaluación. Si un cuidador escribe: “Javier estaba jugando a la casita”, faltan muchos detalles para el análisis posterior.

Sin embargo, si escribe: “Javier agarró el bote con la mano izquierda. Tomó firmemente una cuchara de madera con la mano derecha y mezcló lento la sopa de mentira en círculos, en el sentido de las agujas del reloj. Sarina se acercó, le dio a Javier unas especias y le dijo: ‘Asegúrate de que la sopa tenga mejor sabor’”, ahí está incluyendo más detalles visuales e información para la evaluación o la elaboración del plan de estudios. La segunda afirmación resulta más eficaz porque detalla los comportamientos específicos que observó.

Referencias

[1] Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos, ECLKC, Child observation: The heart of individualizing responsive care for infants and toddlers es de dominio público.

[2] Daffin, L. W. (2022). Módulo 5: Determining the ABCs of Behavior via a Functional Assessment. En Principles of Behavior Analysis and Modification (4.a ed.) con licencia CC BY NC SA.